sábado, 17 de enero de 2009

La mujer, como el hombre, víctima de la depresión económica

Las mujeres, en muchos casos, lograron la igualdad que buscaban. Pero la igualdad funciona en las buenas y en las malas.

En Estados Unidos son hoy víctimas del mal momento económico y se retiran de la fuerza laboral.

Desde los años 60 se vienen sumando, cada vez en mayor número, a las huestes de trabajadores. Ese proceso se detuvo por primera vez esta década y todo indica que se podría acelerar. Por cierto, por primera vez desde que apareció el "movimiento de la mujer" en Estados Unidos cayó el porcentaje de mujeres en el trabajo, según informa el Bureau of Labor Statistics. Cada una de las siete anteriores recuperaciones económicas ocurridas desde 1960 terminó con mayor porcentaje de mujeres en la fuerza laboral.

Cuando los economistas comenzaron a advertir esta tendencia hace dos o tres años, muchos pensaron que el retiro del empleo pago obedecía a un deseo de quedarse en casa, bien para criar hijos o porque sus maridos ganaban bien o porque sentían que debían manejar sus hogares.


Pero ahora surge una explicación diferente en los datos del gobierno, en la investigación realizada por varios economistas por encargo de una comisión del Congreso nacional.

Después de incursionar prácticamente en todas las ocupaciones posibles, las mujeres sufren en gran escala los mismos problemas que los hombres: momento económico difícil, despidos, tercerización, sueldos estancados o la perspectiva de reducción de sueldo. Y están respondiendo como los hombres, retirándose o desapareciendo por un tiempo.

El estudio de la comisión económica (Joint Economic Committee) da cuenta del creciente número de mujeres que dejan de trabajar ("en un pie de igualdad con los hombres") y concluye que eso podría tener nefastas consecuencias para la familia. "Las mujeres llevan a sus hogares alrededor de un tercio del ingreso familiar," dijo Carolyn Maloney, senadora demócrata por Nueva York y vicepresidenta de la comisión conjunta. "Y sólo las familias donde la mujer también trabaja han visto una mejora real en su nivel de vida."

La proporción de mujeres con empleo en lo que constituye su vida activa - 25 a 54 años - llegó a su punto culminante a principios del año 2000, con 74,9%, junto cuando estaba por explotar la burbuja de inversiones tecnológicas. Ocho años después, en junio, era 72,7%. La reducción es aparentemente pequeña, pero esos 2,2 puntos porcentuales borran más de 12 años de conquistas para las mujeres. Si hubiera predominado el viejo patrón de expansión que imperaba antes, habría cuatro millones más de mujeres trabajando en sus años más productivos. El patrón es similar entre las que tienen alto y bajo nivel de educación, entre las casadas y las que nunca lo hicieron, entre las madres con hijos adolescentes y las que tienen hijos pequeños, entre las blancas y las negras.

Las mujeres, en suma, están por primera vez retirándose del trabajo con la misma uniformidad que los hombres en la franja activa de su vida. 96% delos hombres tenía empleo en 1953, su año récord. Eso cayó a 86,4 % al día de hoy. La diferencia está en que cuando las mujeres dejan de trabajar, naturalmente se supone que es para atender su casa, algo que no ocurre con los hombres.

El retiro más notable se ve en la manufactura, donde más de un millón de mujeres desaparecieron de las nóminas desde 2001. Como los hombres, muchas no volvieron a empleos en otros sectores.

A veces es el estancamiento de los salarios lo que las desalienta para buscar otro empleo, dice Lawrence Katz, economista laboral de Harvard. El sueldo ya no está subiendo para las mujeres de 25 a 54. Por el contrario, el salario medio ha caído en los últimos años, de US$ 15,04 la hora en 2004 a US$ 14,84 en 2007, con ajuste por inflación, según el Economic Policy Institute. (Actualmente, el mismo salario para los hombres es dos dólares más).

Para las mujeres, eso es algo que no se había prolongado tanto desde los años 70, y como eso es una experiencia nueva para ellas, "muchas son más renuentes que los hombres a aceptar menos paga", dice Nancy Folbre, economista de la universidad de Massachusetts.
Fuente mercado

La anorexia y la vigorexia tendrían un origen genético común


Un nuevo estudio sobre gemelos sugiere que, en los hombres, la obsesión por la talla pequeña y la falta de desarrollo, conocida como trastorno de dimorfismo muscular o vigorexia, tendría el mismo origen genético que la anorexia nerviosa.

En cinco pares de gemelos, cada uno con un varón con anorexia, un equipo de investigadores en Finlandia halló una "responsabilidad familiar" en los problemas relacionados con el trastorno alimentario, como la depresión, el dimorfismo muscular y el trastorno obsesivo compulsivo.

Los resultados sugieren que todos los síntomas tienen raíces genéticas similares.

La anorexia nerviosa no es frecuente en los varones y el avance de la enfermedad casi no se conoce, explicó el equipo dirigido por Anu Raevuori, de la Universidad de Helsinki, en Finlandia.

Para comprender mejor cómo la enfermedad avanza en los hombres y para analizar los factores potencialmente familiares los autores identificaron a los cinco pares de gemelos de entre 2.122 que habían nacido en Finlandia entre 1975 y 1979.

Cada uno de los cinco hombres con anorexia había tenido sobrepeso antes de los 17 años, pero sus gemelos tenían peso normal a los 20.

"El sobrepeso temprano en los varones más vulnerables influía en el comienzo de las dietas, lo que, a la vez, provocaba anorexia nerviosa", escribió el equipo en International Journal of Eating Disorders.

Cuatro de los hombres con anorexia y cuatro de sus respectivos gemelos siempre habían sufrido un trastorno afectivo que, menos en uno de ellos, era depresión grave.

En todos los pacientes con anorexia nerviosa, el trastorno precedía a la aparición de la depresión.

Sólo uno de los participantes con anorexia recibió tratamiento.

Si bien todos se recuperaron de la enfermedad, conservaron algunos síntomas, como dimorfismo muscular, práctica excesiva de levantamiento de pesas y consumo de proteínas y otros suplementos para formar músculos.

Aunque los hombres padecieron anorexia durante un período relativamente corto, según observó el equipo, todos consideraron el trastorno alimentario como "un momento especialmente estresante" de sus vidas.

"Los sentimientos de vergüenza, aislamiento y alienación fueron frecuentes y surgieron del estigma doble de tener no sólo una enfermedad mental, sino también una enfermedad de mujer", concluyó el equipo.

El deterioro de la calidad de vida mental y física por el trastorno bipolar

La peor calidad de vida física podría ser consecuencia del uso del alcohol y del tabaco y de los efectos del tratamiento.

El trastorno bipolar conlleva una peor calidad de vida tanto mental como física, incluso en los períodos de normalidad, según concluyen los resultados de un estudio realizado en el Instituto de Neurociencias de la Universidad de Granada y la Unidad de Salud Mental del Hospital Neurotraumatológico de Jaén que han sido publicados en la revista The American Journal of Psichiatry, órgano oficial de la Asociación Americana de Psiquiatría.

El estudio, diseñado para evaluar la calidad de vida de los pacientes que sufren este tipo de trastorno, fue llevado a cabo con 108 pacientes y un grupo comparativo formado por 1.210 personas procedentes de una muestra de población general.

Dentro del grupo de pacientes, 48 de ellos se encontraban eutímicos, es decir, sin síntomas activos de la enfermedad; los 60 restantes (no eutímicos) presentaban síntomas relevantes en el momento de la evaluación.

El trastorno bipolar, conocido tradicionalmente como psicosis maníaco-depresiva, afecta aproximadamente a 3 de cada 100 personas y se caracteriza por la alternancia de episodios recurrentes de depresión (fases depresivas) y de períodos de gran euforia (fases maníacas). El afectado oscila intensamente (generalmente en semanas o meses) entre la alegría y la tristeza, además de gozar de otros periodos de normalidad (eutimia).

Atendiendo a los resultados, los investigadores señalaron que la peor calidad de vida física podría ser el resultado, cuando menos parcialmente, de un mayor uso de sustancias adictivas como alcohol y el tabaco, los efectos secundarios del tratamiento farmacológico a largo plazo y un estilo de vida más sedentario.

Además, señalaron que los pacientes que sufren una peor calidad de vida mental son quieres comenzaron a sufrir la enfermedad antes de los 20 años, quienes llevan más tiempo sufriéndola, quienes padecen el subtipo II de la enfermedad, quienes presentan dependencia del tabaco y quienes en el presente sufren síntomas depresivos. A su vez, los investigadores granadinos demostraron que tener un alto apoyo social (de la familia, por ejemplo) está asociado a una mejor calidad de vida en el paciente.

Otro de los aspectos revelado por el trabajo es que los síntomas depresivos (tristeza, apatía, cansancio, dificultad de concentración, insomnio, falta de apetito, etc.) afectan a la calidad de vida más que los síntomas maníacos (autoestima exagerada, desinhibición, verborrea, hiperactividad, aumento del apetito sexual), y que también producen más discapacidad o repercusión negativa en la capacidad para trabajar y para la vida familiar y social. En este sentido, explicaron que probablemente se deba a que los síntomas maníacos son más breves en el tiempo y responden bien a la medicación, mientras que los depresivos suelen ser más difíciles de eliminar por completo.

Obsesión a mentir

Víctor Ingrassia (La Nación). Faltar a la verdad en forma repetitiva es un problema patológico que suele comenzar durante la niñez

Para el poeta inglés Alexander Pope, "el que dice una mentira no sabe qué tarea ha asumido, porque estará obligado a inventar veinte más para sostener la certeza de esta primera".

Quizá no sean veinte, pero sin duda ése es el comportamiento de quien no puede dejar de mentir en forma compulsiva y hace de esto un hábito de vida.

Si bien la mentira forma parte del ser humano desde su niñez, la conducta repetitiva de faltar a la verdad desde que uno tiene uso de razón deja de ser normal y se convierte en un problema patológico que hoy puede resolverse con la terapia adecuada.

"La compulsión es la base de todo tipo de trastorno obsesivo y la mentira repetitiva está relacionada con problemas en personalidades inflexibles y de conducta rígida", afirmó el doctor Eduardo Grande, jefe de la División Salud Mental del Hospital General de Agudos Teodoro Alvarez. Según el psiquiatra, la mentira compulsiva es difícil de manejar terapéuticamente porque se oculta tras otras conductas, como la compulsión por el juego o las adicciones.


Según estadísticas de 2005 del Servicio de Salud Mental del hospital, el 92% de los pacientes miente sobre el consumo de sustancias; el 25%, sobre el consumo de alcohol, y el 58%, sobre el juego patológico (ludopatía).

Una marca de la niñez

Aunque la personalidad del mentiroso compulsivo se manifiesta en la juventud o la adultez, los especialistas señalan que es durante la niñez cuando comienza a construirse.

Para el doctor Daniel Alberto Vidal, de la Asociación Argentina de Psiquiatría, mentir de chico "es una creación imaginativa espontánea común en los primeros años de vida, que forma parte del desarrollo psicoevolutivo normal". Como ejemplos señaló el mentir en los primeros diálogos con juguetes o mascotas y en los relatos de la vida cotidiana, que suelen adornar con situaciones y personajes imaginados.

"La conducta del mentiroso compulsivo tiene su raíz en los vínculos más primarios; es decir, aquellos que lo han formado como sujeto. En la niñez se forma su personalidad según la educación y el contexto en el que se vive. Está en constante asimetría con los adultos, por lo que se vale de mentiras inocentes para intentar igualarse", explicó la psicóloga Miriam Mazover, directora del Centro Dos.

Ahora, según la experta, el hecho de que los padres repriman las mentiras de su hijo le impide a éste generar una marca que lo caracterice y le suele dejar un trauma que se dará a conocer en la adultez. "Comienza a operar un mecanismo en la mente que quedó enquistado en la infancia, sin elaborar. Así, la mentira repetitiva toma el lugar del recuerdo fallido y surge en forma inconsciente", agregó Mazover.

Trastornos de la conducta

Según Vidal, existen cuatro tipos de manifestación de la mentira: la hecha en forma esporádica (todos alguna vez mentimos), la evolutiva (de niño), la que se dice como producto de un padecimiento sintomático (para obtener atención gracias a la creación de un falso personaje) y la efectuada como conducta repetitiva. Esta es la mitomanía, en la que se vive para y por la mentira.

"El mitómano utiliza la mentira como conducta de vida, falseando la verdad respecto de hechos, cosas y personas con el objeto de hacer un daño", destacó Vidal, psiquiatra del Departamento de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UBA.

Para Mazover, existen tres tipos de personalidad donde se asienta esa conducta obsesiva: la psicótica (producto de un delirio), la perversa (la mentira es un instrumento para falsear hechos y dichos) y la neurótica (el otro aparece como alguien que lo tiene todo y se necesita de la mentira para llamar su atención).

Según Mazover, la mentira compulsiva no es un motivo de consulta, pero sí subyace como un problema en el 35% de los pacientes tratados en el Centro Dos.

Cómo prevenir

Una forma de evitar que la mentira se transforme en una obsesión en la adultez es "no castigar a los chicos cuando dicen una mentira menor, ya que es propio de la imaginación infantil y forma parte de su maduración", explicó Vidal, para quien los padres deben explicar las diferencias entre fantasía y realidad.

Destacó, además, que el adulto que padece este trastorno en forma histriónica debe recurrir a terapia.

Pero para poder prevenir, es necesario detectar la conducta a tiempo. En este sentido, dos universidades estadounidenses difundieron en 2005 trabajos experimentales que sugieren que las mentiras podrían detectarse con un estudio de rutina. En uno, científicos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Pennsylvania compararon imágenes obtenidas con resonancia magnética funcional del cerebro de sujetos cuando mentían y cuando decían la verdad. Según los resultados publicados en Nature, determinaron que las mentiras se pueden detectar con un 99% de precisión.

En el segundo estudio, expertos de la Universidad de California del Sur hallaron que el cerebro de los mentirosos compulsivos posee diferencias estructurales respecto de quienes dicen la verdad: en el lóbulo frontal tienen más sustancia blanca que materia gris.

Pero a pesar de que hay quienes aseguran que "todos los hombres nacen sinceros y mueren mentirosos", lo que acaba de leer es cierto... De verdad.

La salud mental

La salud mental es un asunto cotidiano que puede afectar a la familia, la escuela, el lugar de trabajo o las actividades de ocio.

Mientras que la buena salud mental contribuye al capital social, humano y económico de la sociedad, el estado contrario puede reducir drásticamente la calidad de vida de las personas afectadas y sus familias.

No se trata de un reto que se limite exclusivamente al sector de la asistencia sanitaria. La salud mental se encuentra entre las tres primeras causas de ausencia laboral y es uno de los motivos principales de jubilación anticipada o de disfrute de una pensión de invalidez.

Además, representa un coste importante para la sociedad que repercute en la economía, la educación, la asistencia social y los sistemas judicial y penitenciario.

Los trastornos mentales más habituales en la UE son la ansiedad y la depresión, si bien existen importantes desigualdades entre los Estados miembros y dentro de los mismos. Además, las iniciativas en este ámbito suelen presentar un panorama fragmentado.

Por estas razones, la protección y la promoción de la salud mental ocupan un lugar importante en el programa de actividades de la Unión Europea, que estudia en la actualidad una estrategia al respecto.

En el Libro Verde «Mejorar la salud mental de la población. Hacia una estrategia de la Unión Europea en materia de salud mental», publicado en octubre de 2005, se afirma que esta estrategia podría aportar un valor añadido mediante la creación de un marco de intercambio y cooperación entre los Estados miembros, las partes interesadas de los sectores afectados y la comunidad investigadora.

Además, podría incrementar la coherencia y actuar como interfaz entre la actuación política y la investigación.

Entre los principales objetivos de la estrategia de la UE en materia de salud mental figuran las actuaciones preventivas, la asistencia y el tratamiento, la lucha contra la estigmatización y la discriminación de las personas que padecen trastornos mentales y la mejora de la información y los conocimientos.

A título de ejemplo, cabe mencionar algunas de las actuaciones que se consideran cruciales, como son la mejora de las habilidades parentales, el fomento de una cultura participativa en el lugar de trabajo, las redes de apoyo social y la defensa de la inclusión social, los derechos humanos y la dignidad de las personas.

Fuente ec.europa.eu

El ejercicio no frena la depresión

Sólo las personas predispuestas a la actividad física muestran benefinicios psicológicos La actividad física está relacionada en las sociedades occidentales con una disminución de los síntomas de ansiedad y depresión.

Sin embargo, no es la adrenalina del deporte ni el sosiego experimentado después del esfuerzo psicomotor lo que aparta a los ciudadanos de desarrollar síntomas negativos en su estado de ánimo. Es la predisposición genética la que nos lleva a hacer ejercicio y a beneficiarnos psicológicamente de él, si se practica de manera voluntaria.

Numerosos artículos médicos publicados al respecto ponen de relevancia la influencia positiva del deporte en las personas con tendencia depresiva.

Sin embargo, los autores de la investigación publicada en el 'Archives of General Psychiatry' matizan que las muestras seleccionadas en los estudios precedentes sólo evaluaban a segmentos específicos de la población, más propensos a desarrollar tales efectos positivos en el desarrollo de los síntomas de ansiedad y depresión.

Los científicos, dirigidos por Marleen H. M. De Moor, han seleccionado una muestra de más de 8.500 personas de 18 a 50 años. En total, han evaluado los casos de 5.952 gemelos, 1.357 hermanos de los mismos (con carga genética emparentada pero no exacta) y unos 1.249 progenitores.

Desde 1991, los participantes recibieron cada dos años un cuestionario en el que ellos mismos reflejaban su estado de salud, modos de vida y rasgos de su personalidad de un modo detallado. El nivel de las actividades físicas desarrolladas por cada uno de los miembros de la muestra se midió a través de la llamada 'tasa metabólica equivalente' (MET), que contabiliza el gasto energético muscular que se experimenta con cada ejercicio. Mientras que los síntomas depresivos fueron agrupados en distimias, ataques de pánico, fobia social, comportamiento neurótico y ansiedad generalizada.
Gemelos exactos

Los individuos que realizaban ejercicio físico con más carga metabólica manifestaban un leve descenso de los síntomas de la depresión, sin embargo, la causa del buen estado de ánimo no provenía de las actividades en sí, sino de su comportamiento a la hora de realizar un ejercicio y su carácter voluntario.

Los datos de los gemelos monocigóticos, es decir, los genéticamente idénticos, fueron analizados con especial interés para determinar la importancia del deporte en el mantenimiento de una autoestima favorable. Sin embargo, los resultados arrojaron que el gemelo sometido a un mayor entrenamiento físico no mostró menos indicios de ansiedad o depresión que el que practicó deporte de una forma más moderada. Los síntomas, en caso de haberlos desarrollado, eran los mismos en ambos hermanos y, en ocasiones, incluso eran similares a los demás miembros de la familia. Además, los análisis mostraron, con el tiempo, que no se produjeron cambios de humor significativos en el gemelo que aumentó su nivel de ejercicio.

El resultado no fue igual, en cambio, en los gemelos fraternales, nacidos de dos óvulos fecundados de forma independiente. En estos casos, se observó que el hermano físicamente más activo mostraba menos síntomas de tendencia depresiva, cuestión que los científicos holandeses atribuyen a un componente genético distinto que hace que uno de ellos tenga más predisposición a practicar deporte de forma voluntaria, que sí mejoraría el estado de ánimo de las personas.

Los investigadores de la Universidad de Amsterdam (Holanda) han matizado que "se desconocen cuáles son exactamente los genes que pueden estar implicados en el comportamiento de las personas a la hora de realizar un ejercicio voluntario" (uno de los factores relacionados con la disminución de la ansiedad y la depresión), pero apuntan a la posibilidad de que la dopamina, la norepinefrina y la serotonina se encuentren entre los componentes.

Según recoge el estudio, "el ejercicio realizado de forma voluntaria en el tiempo libre está bajo la influencia de factores genéticos, mientras que el dirigido o supervisado por alguien está determinado por otros factores ambientales que no influyen en el estado de ánimo".

Aun así, los autores insisten en que los resultados "no quieren decir que el deporte no pueda beneficiar a aquellos con ansiedad o trastornos depresivos", sino que, al contrario de lo que se ha afirmado anteriormente, éste no tiene efectos similares a los antidepresivos o a las terapias cognitivas.

La ebriorexia

Anorexia y bulimia son dos enfermades que tienen a muchas familias en alerta. No dejan de crecer las enfermedades psicológicas relacionadas con la alimentación.

Ahora nace la ebriorexia, que es una conjugación de anorexia, bulimia y alcoholismo. No comer sometiéndose a una abstinencia alimenticia voluntaria, realizar un atracón y posteriormente provocar el vómito y como tónica dominante en ambas conductas, abusar de las bebidas alcohólicas, así es la ebriorexia.

Las famosas han sido las pioneras en esta enfermedad. Victoria Beckham, Lindsay Lohan, Tara Reid o Misha Burton han sido algunas de los personajes hollywoodenses que se han relacionado con esta enfermedad, pues han sido "pilladas" en numerosas ocasiones bajo los efectos del alcohol y su físico ha sido más de una vez criticado por lucir una extrema delgadez. Además, las visitas a los centros de desentoxicación no ha hecho más que agravar los rumores.
Victoria Beckham afirmó hace tiempo que intentaba combatir su delgadez consumiendo alcohol para meter más calorías en su cuerpo. Lindsay Lohan reconoció que padecía anorexia y su madre confirmó sus problemas con el alcohol, incluso los periodistas captaron imágenes de la actriz en una discoteca bebiendo vodka y tomando pastillas adelgazantes.

La obsesión por estar delgado, la creciente aceptación social sobre el consumo de drogas y bebidas alcohólicas, se combina con la moda de las rehabilitaciones, un peligroso cóctel responsable del aumento de la nueva enfermedad.

Solamente cabe esperar que las más jovencitas no sigan este absurdo "estilo de vida".

La depresión de las madres

Los bebés cuyas madres padecieron depresión antes de quedarse embarazadas son mas sensibles a presentar patrones de sueño caóticos, señala un estudio difundido por la Universidad de Michigan (UM), en EE.UU.

De este modo, los niños nacidos de madres con cuadros depresivos toman más siestas durante el día, requieren más tiempo para calmarse por la noche y se despiertan más a menudo.

Sin embargo, "esto no significa que los hijos de madres con depresión estén condenados a seguir los pasos de sus progenitoras, aún cuando esta enfermedad tiende a continuar en la familia", señaló en un comunicado Roseanne Armitage, responsable del equipo del Laboratorio de Sueño y Cronofisiología de la UM.

Asimismo, la experta alerta que los padres y madres que no han sufrido depresiones tampoco pueden ignorar la importancia del sueño de sus recién nacidos.

Armitage presentará los resultados completos de este estudio la próxima semana en la reunión de la Sociedad del Sueño en Glasgow (Escocia).

Según explicó el laboratorio de esta universidad, "los seis primeros meses de vida de un bebé son cruciales para el desarrollo de patrones regulares de sueño y vigilia, conocidos como ritmos circadianos, que todo niño necesita para un futuro saludable".

Por este motivo, las familias, especialmente las que presentan historiales depresivos, deben prestar mucha atención a las condiciones que crean para el sueño de sus infantes desde el nacimiento.

"La privación crónica del sueño está relacionada con un riesgo elevado de depresión en todas las personas, pero en las nuevas madres, debido a los cambios hormonales y la necesidad de recuperarse del embarazo y del parto, la privación del sueño puede ser realmente un problema", dice el estudio.

Los niños de cortas edades necesitan una siesta durante el día para obtener todo el sueño que necesitan, de 11 a 18 horas en los primeros dos meses después del nacimiento, de 11 a 15 horas en los próximos diez meses y de 12 a 14 horas entre el primer y el tercer año.

"El mantenimiento de un horario muy regular para dormir es increíblemente importante", anotó Armitage, quien añadió que "tanto para adultos, niños o bebés cuanto más estable sea la hora de ir a dormir menos caótico es el sueño durante la noche".

Adicciones

¿Qué es la farmacodependencia?
El uso de drogas como marihuana, cocaína, heroína y otras "drogas callejeras" y el abuso de algunos medicamentos psicotrópicos (tranquilizantes, sedantes, píldoras para el dolor y anfetaminas) como medio de obtener un "viaje" o para enfrentar el estrés y los problemas emocionales.

¿Cómo se desarrolla adicción a una droga?
Se dice que existe dependencia o adicción a una droga cuando existe una necesidad física o psicológica de esa substancia. La persona puede no darse cuenta que es adicta hasta que intenta dejar de consumir la droga repentinamente. La abstinencia de una droga puede producir síntomas desagradables y requerir de tratamiento médico o de grupos de ayuda.

¿Cómo pueden prevenirse las adicciones y el alcoholismo?
Identifique en usted o sus familiares los signos de estrés emocional. Trate de entender y resolver las causas de depresión, ansiedad o soledad. No recurra al alcohol o a las drogas para enfrentar estos problemas.


Si bebe, hágalo moderadamente. Cuando tenga reuniones y fiestas, ofrezca también bebidas no alcohólicas. Los hijos aprenden también con el ejemplo.

Si hay antecedentes de alcoholismo en la familia, preste especial atención. Existen tendencias familiares al alcoholismo.

Cuando el médico le recete un medicamento, pregunte si este puede causar dependencia, especialmente si se trata de píldoras para el dolor, tranquilizantes, sedantes y píldoras para dormir. Siga las instrucciones cuidadosamente y no exceda las dosis recomendadas.

No use medicamentos para dormir, perder peso o relajarse sin prescripción y vigilancia médica.

No consuma alcohol cuando esté bajo tratamiento con medicamentos. Muchos de ellos provocan reacciones adversas al combinarse con el alcohol

¿Qué puedo hacer ante las adicciones y el alcoholismo?

Identifique y reconozca el problema en usted o en algún miembro de la familia y consúltelo con su médico como un problema de salud.

Infórmese. Asista a una reunión de Alcohólicos Anónimos, Narcóticos Anónimos o Al-Anon. Estos son grupos de autoayuda para lograr dejar de beber o consumir drogas. Busque libros o literatura sobre el tema.

Nunca ignore el problema. El alcoholismo y la drogradicción son enfermedades graves, progresivas y que causan graves daños a la salud del individuo y de la familia.

¿Cómo se desarrolla adicción a una droga?
Se dice que existe dependencia o adicción a una droga cuando existe una necesidad física o psicológica de esa substancia. La persona puede no darse cuenta que es adicta hasta que intenta dejar de consumir la droga repentinamente. La abstinencia de una droga puede producir síntomas desagradables y requerir de tratamiento médico o de grupos de ayuda.

¿Cómo pueden prevenirse las adicciones y el alcoholismo?
Identifique en usted o sus familiares los signos de estrés emocional. Trate de entender y resolver las causas de depresión, ansiedad o soledad. No recurra al alcohol o a las drogas para enfrentar estos problemas.

Si bebe, hágalo moderadamente. Cuando tenga reuniones y fiestas, ofrezca también bebidas no alcohólicas. Los hijos aprenden también con el ejemplo.

Si hay antecedentes de alcoholismo en la familia, preste especial atención. Existen tendencias familiares al alcoholismo.

Cuando el médico le recete un medicamento, pregunte si este puede causar dependencia, especialmente si se trata de píldoras para el dolor, tranquilizantes, sedantes y píldoras para dormir. Siga las instrucciones cuidadosamente y no exceda las dosis recomendadas.

No use medicamentos para dormir, perder peso o relajarse sin prescripción y vigilancia médica.

No consuma alcohol cuando esté bajo tratamiento con medicamentos. Muchos de ellos provocan reacciones adversas al combinarse con el alcohol

Uso y abuso de heroína y opiáceos

La heroína y otros opiáceos son drogas sedativas que deprimen el sistema nervioso, ralentizan el funcionamiento del organismo y combaten el dolor físico y emocional.

En general, los opiáceos como la heroína bloquean los mensajes de dolor, creando una sensación falsa de calma al hacer más lento el funcionamiento orgánico e incrementar las sensaciones de placer en el cerebro.

Por tanto, el efecto más usual de la heroína es el sentimiento de relajación, calidez y desapego, junto a una disminución de la ansiedad.

Algunos consumidores dicen que la heroína les hace sentir como si estuvieran flotando, invencibles, y otros dicen sentirse entumecidos.

Estos efectos empiezan rápidamente y pueden durar algunas horas, aunque varían mucho dependiendo de la dosis y de la vía en que la heroína es administrada.
Efectos de la heroína

Esta inmediatez en los efectos de la heroina tiene que ver con que al ser administrada, esta sustancia alcanza el cerebro muy rápidamente.

Pero esto significa algo más: que la heroina es altamente adictiva, es decir, que produce un alto número de adictos entre sus consumidores.

Adicción heroína y otros opiáceos: una enfermedad tratable en un centro de desintoxicación especializado.

La adicción heroína (opiáceos) es vista por mucha gente como un problema estrictamente social o de carácter, y desde estas premisas se suele caracterizar a los adictos a esta sustancia como personas moralmente débiles o con tendencias criminales.

Frecuentemente se cree, de manera errónea, que los adictos a la heroína serían capaces de abandonar el consumo si estuvieran dispuestos a cambiar su conducta.

Por otro lado, muchos piensan que, así como el adicto lo es simplemente porque ha decidido consumir demasiada heroína, la adicción a la heroína es simplemente un consumo demasiado alto de heroína.

Pero científicos, médicos y psicólogos coinciden de manera contundente en diferenciar el abuso de la adicción a la heroína.

Las investigaciones demuestran que la adicción, al contrario que el uso o incluso el abuso de heroína, no es un problema de libre decisión.

La adicción comienza cuando hay un abuso de heroína, es decir, cuando el consumidor decide “conscientemente” administrarse heroína de manera repetida y habitual.

Pero no es solo eso. La adicción a la heroína supone introducirse en un estado cualitativa y cuantitativamente diferente, un proceso de consumo compulsivo de heroína y de daños a nivel del tejido cerebral.

Por tanto la adicción a la heroína, más allá de consideraciones morales o sociales, es una enfermedad tratable, una dolencia. La adicción es una enfermedad del cerebro.

Porque la heroína no sólo interfiere en el funcionamiento cerebral normal al crear fuertes sentimientos de placer, sino que además tiene efectos a largo plazo en el metabolismo y la actividad del cerebro.

En un determinado momento del consumo o del abuso de heroína, se producen cambios cerebrales que convierten el abuso en adicción, en enfermedad. Así, los adictos a la heroína sufren un intenso y compulsivo deseo de esa droga (craving) y no pueden abandonar el consumo por sí mismos.

Aunque los mecanismos de la adicción todavía no son totalmente entendidos, sí se sabe que la tolerancia y la dependencia pueden conducir a ella: cuando la heroína se consume repetidamente, el cerebro se adapta y se vuelve cada vez menos sensible a esta sustancia, por lo que la dosis de consumo debe ser incrementada gradualmente para obtener los mismos efectos.

Esto es la tolerancia. Por otra parte, cuando se deja de consumir heroína, el consumidor experimenta alteraciones físicas, esto es, síndrome de abstinencia, que desaparece cuando se vuelve a consumir heroína.

Estos síntomas de abstinencia se dan porque el cerebro se ha adaptado a la presencia de la droga (es decir, hay una neuroadaptación), y cuando el consumo de heroína se interrumpe bruscamente se hacen evidentes los desórdenes cerebrales que estaban enmascarados por el consumo. Cuando un consumidor se vuelve dependiente de la heroína, su organismo sólo funciona “normalmente” si recibe esta droga.

La adicción implica, como se ha anotado, un intenso e irresistible deseo de droga, un comportamiento de búsqueda compulsiva de heroína. El consumo de esta droga se vuelve obsesivo.
El adicto está atrapado. El problema o la situación que estuviera intentando resolver cuando comenzó a consumir heroína se ha borrado de su mente.

En este punto, en lo único que puede pensar es en conseguir y consumir la droga.

Por tanto, se pierde el control de este consumo y se ignoran sus gravísimas consecuencias, y sólo un tratamiento llevado a cabo por profesionales puede lograr una recuperación de esta enfermedad.

Efectos de la adicción a la heroína y otros opiáceos

La adicción a la heroína puede conducir a la muerte, y produce las siguientes complicaciones médicas:

Infecciones bacterianas de los vasos sanguíneos.
Abscesos y otras infecciones de tejidos blandos.
Venas marcadas u obstruidas
Enfermedades infecciosas como hepatitis o VIH/SIDA.
Infecciones de las válvulas cardiacas.
Problemas musculares y articulares.
Enfermedades del hígado y los riñones.
Daños pulmonares, entre ellos neumonía y tuberculosis.

Por otro lado, muchos de los aditivos que se añaden a la heroína pueden incluir sustancias que no se disuelven completamente y que pueden obstruir los vasos sanguíneos que conducen a los pulmones, hígado, riñones o cerebro. Esto puede causar infección o muerte de pequeñas áreas de células en órganos vitales. Reacciones inmunes a estos aditivos pueden causar también artritis u otros problemas reumáticos.

Y por supuesto, compartir jeringuillas, agujas o fluidos durante el consumo puede conducir a algunas de las más graves infecciones relacionadas con la adicción a la heroína, como la hepatitis B y C, el VIH y otros virus de transmisión sanguínea, que a su vez, los adictos pueden transmitir a sus parejas sexuales o sus hijos. Por último, los efectos de la adicción a la heroína no sólo son físicos. Insomnio, ataques de pánico y funciones mentales obnubiladas son algunos de los síntomas psicológicos comunes en los adictos a esta sustancia.

Según el estudio los antidepresivos pueden dañar la fertilidad masculina

Son dañinos para el esperma, según científicos de EE UU.
Lo vuelve más lento en su camino por el sistema reproductivo.
Aunque todavía no se conoce el alcance real del estudio.

Los medicamentos que consumen numerosos hombres para combatir un estado de depresión pueden traerles graves problemas en el futuro a la hora de ser padres, según un estudio elaborado por científicos estadounidenses, del que se desprende que estos tratamientos son dañinos para el esperma.

Aunque todavía no se conoce el alcance real de este estudio, ya que se trata de un informe provisional, los expertos en salud mental recomiendan defienden el tratamiento de la depresión a través de terapias de grupo o de ejercicio, para evitar estos medicamentos que, señalan, tienen también otro tipo de riesgos.

Según el estudio publicado en la revista New Sciencist, los resultados se deben principalmente a la paroxetina, uno de los antidepresivos más comunes, aunque uno de los efectos que produce es hacer más lentos a los espermatozoides en su camino a través del sistema reproductivo masculino.

Esto se aprovecha para tratar la eyaculación precoz, pero es dañino para el esperma. Así se demostró durante el estudio que se realizó sobre 35 voluntarios sanos que proporcionaron muestras antes, durante y después del tratamiento con paroxetine, una sustancia que estuvieron consumiendo durante cuatro semana.

En un principio, destacan los expertos a la publicación, en declaraciones recogidas por otr/press, no se apreció demasiadas diferencias entre el antes y el después, en cuanto "a la forma y al movimiento del esperma".

Sin embargo, las pruebas sobre "la fragmentación de ADN" produjeron un resultado diferente ya que en las muestras se pudieron detectar bastantes espermatozoides con problemas de ADN, en concreto un 30,3 por ciento del esperma de cada uno de los encuestados. Ante estos resultados, los científicos se preguntan ahora si este cambio en la 'salud' del esperma sería tan grave como para afectar la fertilidad total, o si el 70 por ciento restante de esperma natural sería bastante para producir un embarazo viable.

En este sentido destacaron que en parejas que sufren este tipo de problemas, los estudios han señalado que las parejas donde el esperma del hombre tiene niveles más bajos de producción de espermatozoides sanos es más difícil que alguno de ellos se fecunde de manera satisfactoria en la matriz.

El Doctor Allan Pacey, profesor de la Universidad de Sheffield, y participante en este estudio, explicó que tras este descubrimiento es necesario que "se lleven a cabo más investigaciones para ayudar a científicos a evaluar el riesgo" real que puede suponer el consumo de los antidepresivos.

Así destacó que el aumento del daño con la paroxetine es evidente y alarmante, "aunque el nivel en el que pensamos que el daño se hace clínicamente significativo todavía es causa de polémica entre muchos científicos", de ahí la necesidad de continuar con estudios de este tipo. "Hay que llegar más lejos", comentó Pacey.

El fabricante no está preocupado

A raiz de este estudio, el fabricante del medicamento, GlaxoSmithKline, precisó que su intención es repasar los contenidos de este documento, aunque señaló que los pacientes deben estar tranquilos ya que, a su juicio, "los clientes no pueden estar preocupándose porque esto es un estudio preliminar con un pequeño grupo de la muestra", informó la BBC. Aún así destacó que los que estén preocupados pueden consultar al médico para que les recete otro tipo de medicamentos.

"Los antidepresivos pueden ser una cuerda salvavidas para muchas personas, y el riesgo de recaída debe ser tenido en cuenta en el equilibrio de los riesgos y las ventajas de estas medicinas", señaló por su parte el Doctor Andrew McCulloch, de la Fundación de Salud mental quien destacó que "la mayor parte de medicaciones llevan algún nivel de riesgo, y los antidepresivos no son diferentes", pues, a su juicio se trata de una droga poderosa, de manera que, para él, no ha ido una sorpresa este descubrimiento y el impacto que estas pastillas pueden tener para el cuerpo.

Depresión se asocia a peor pronóstico en pacientes infartados

"Las depresiones empeoran en 2,6 veces la evolución de los pacientes con enfermedad cardiovascular (ECV), y los tratamientos antidepresivos no mejoran el pronóstico".

Ladoctora Elisabeth Martens, de la Universidad de Tilburg (Holanda), presentó la semana pasada un estudio en el Congreso Europeo de Cardiología en Múnich, que ahonda en la relación directa que existe entre enfermedad cardiaca y depresión.

El trabajo fue realizado en 2.466 pacientes. Todos ellos sufrían depresión y habían estado hospitalizados una media de 2,5 años.


Entre las conclusiones más relevantes se vio que los síntomas somáticos como el insomnio, el miedo y la culpa son los rasgos depresivos más cardiotóxicos. De hecho, una de las causas por las que los antidepresivos no son efectivos en pacientes que han sufrido un infarto es la falta de una terapia adecuada y el uso de "fármacos típicos", agregó Martens.

Estos resultados ponen de manifiesto la necesidad de revisar las pautas empleadas en pacientes con esta comorbilidad y mejorar los tratamientos actuales para prevenir futuros ataques.

Eleva el riesgo

Por otro lado, diversos estudios indican que el 65 por ciento de los enfermos de infarto agudo de miocardio presentan síntomas depresivos, de los cuales el 20 por ciento desarrolla depresión mayor. Al mismo tiempo, esta enfermedad mental aumenta la posiblidad de sufrir un evento cardiovascular, independientemente de los factores de riesgo clásicos.

Simulación de ratones drogados

Mouse Party se trata de un proyecto divulgativo sobre los mecanismos neuronales implicados en la acción de las drogas realizado por la Universidad de Utah.

Una mirada diferente y alternativa a los efectos de las drogas en el cerebro gracias a varios ratones de laboratorio virtuales.

Los ratones se han montado una fiesta en el laboratorio y cada uno ha elegido su propia droga particular. Vemos un ratón enfarlopado, otro emporrado, otro liserginizado, otro metanfetaminado y un montón más de neologismos derivados del consumo de drogas aparte de los que me acabo de sacar de la manga.


Aunque por los movimientos y la actitud de cada ratón ya se identifica muy bien el tipo de droga que han consumido (al ratón que ha tomado LSD se le ve alucinando con su mano), lo interesante de esta animación es poder escoger a cada uno de los ratones para profundizar sobre la acción de las drogas a niveles microscópicos, viendo lo que ocurre en las sinapsis de las neuronas y, más tarde, en las áreas concretas del cerebro dónde se produce principalmente el efecto.

Desde luego, una forma muy original y entretenida de divulgar sobre los mecanismos de acción de las drogas.

Consumo de heroína y otros opiáceos se dispara con la crisis

En los momentos de crisis económica y de mayor índice de desempleo el consumo de heroína y otros opiáceos se dispara "de manera casi matemática", según informó hoy el psiquiatra del Hospital Universitario de San Juan (Alicante), el doctor Bartolomé Pérez.

No obstante, una vez terminado el periodo vacacional, "existe un incremento cíclico de pacientes con adicciones que acuden a los centros especializados para pedir ayuda y tratamiento", apuntó. Después de lo vivido en los años 80, el consumo de heroína experimentó una bajada principalmente por el "miedo a la infección por VIH" debido a su consumo intravenoso, problema este que se ha reducido porque "ahora el consumo de esta sustancia principalmente es fumado", explicó el experto.

No obstante, "hay que destacar que ahora mismo la tasa de consumo de heroína es la más elevada de la historia de España en población escolar, según se desprende de las cifras del Plan Nacional sobre Drogas", afirmó. Para tratar esta adicción, en España ya está disponible el tratamiento con buprenorfina/naloxona, comercializado como 'Suboxone' por los laboratorios Schering Plough.

En opinión del doctor Pérez, además de su "eficacia y seguridad", este medicamento tiene como "principal ventaja" el hecho de que "hace mucho más difícil que los pacientes tratados sufran una sobredosis en relación con los pacientes tratados con metadona", explicó. Asimismo, este experto destaca el fenómeno de la "normalización" de los pacientes, ya que "pueden acudir a la farmacia para obtener este fármaco para la adicción a opiáceos".

Este fármaco en forma de comprimidos sublinguales se administra una vez al día o incluso en días alternos y puede tomarse en el domicilio, lo que supone que los pacientes no necesitan ir al centro a diario a recibir el tratamiento, según informó hoy la farmacéutica estadounidense.

Una carta a la droga

Querida amiga:

Sé, que cuando leas esta carta, no te afectara lo que pongo en ella, ya que seguirás teniendo tantos admiradores como por desgracia siempre has tenido.

Cuando nos presentaron, apenas si me gustaste, fue al paso de los días lo que hizo que me gustara cada vez más estar contigo. Ya que solo me conformaba verte solo los fines de semana; luego también corría a tu lado los días de diario.

Fue tanto el gusto que le cogí a nuestra relación, que ya apenas si salía con mis amigos.
Poco a poco, me fui apartando más de ellos; unos porque no te querían y me aconsejaban que te dejase, y otros porque también estaban enamorados de ti, y no querían compartirte con ellos.

Nuestra relación cada vez se hacía más intima, ya no vivía más que para ti.
Mi primer fallo fue anteponer té a mi familia, por lo cual, los fui perdiendo a todos.
Más tarde también por tu culpa perdí mi trabajo, al cual no le prestaba la suficiente atención, y terminaron por despedirme.

¡Pero nuestra relación seguía adelante!
Era tal la dependencia que tenía por ti, que ya apenas podía hacer nada si no te tenía a mi lado. Añadiendo eso al tren de la vida que tenía que llevar, pronto me vi en la necesidad de tener que robar para poder estar contigo, aunque tú, no contenta con todo lo que le estaba haciendo a mi vida, cada día exigías más.

Has derrotado mi vida y mi salud, hasta que las secuelas de todo ello me llevaron casi a la muerte.

Gracias a Dios me he dado cuenta a tiempo, de que tu relación solo me trae desgracias.
Es por eso que he decidido escribir estas líneas para romper nuestra relación, con la esperanza de que todo el que la lea y tenga la desgracia de conocerte, pueda darse cuenta de que también destrozara su vida.

¡Hasta nunca!

P.D. Sí ya tienes la desgracia de conocerla, y tu amor por ella te impide dejarla, pide ayuda.
Y sobretodo no se la presente a ningún amigo.

Terapia de Pareja y de Familia

La Terapia de Pareja es un espacio y un tiempo para tomar conciencia de cómo se han ido generando las tensiones, exigencias, desencuentros e incomprensiones que aparecen en todas las relaciones humanas pero que lo hacen de una manera mas profunda y dolorosa en las relaciones de mayor intimidad donde aflora la verdad de nuestro ser con todas las heridas que hemos recibido a lo largo de la vida y que habiamos deseado sanar a traves de una relacion de amor donde pudiéramos sentirnos acogidos, protegidos, comprendidos, queridos, deseados amados...

Paradójicamente las relaciones de pareja se mueven entre dos polos: el de las mayores satisfacciones de intimidad y amor y reconociemiento compartido y el de las mayores incomprensiones y los mayores dolores por sentirnos no amados como deseamos dentro de nosotros mismos.

La vida en pareja hacen aflorar todos las heridas personales con la esperanza de que el amado pueda en su amor acogerlas y sanarlas.

En muchas ocasiones esto no ocurre asi y por el contrario asistimos como testigos o protagonistas a toda una serie de confrontaciones y tensiones mas o menos calladas o expresadas, encubiertas, somatizadas o agresivas y destructivas. Nuestras necesidades y temores aparecen con una intensidad mayor y el desencuentro se repite de manera cíclica en un circulo vicioso que va extendiendo el sentimiento de frustración y descorazonamiento entre los miembros de la pareja.

En la terapia la pareja encuentra un espacio privilegiado para tomar conciencia de lo que sienten y lo que cada uno de ellos esta sintiendo, escuchando, procesando e interpretando y como todos estos procesos estan generando tensiones e incomprensiones. La oportunidad de acceder a los sentimientos verdaderos en vez de a los mecanismos agresivos y defensivos abren un espacio de elaboración de los conflictos y sanación de las heridas de cada miembro que afectan con una carga extrema emocional la relación de pareja.

Terapia Individual

La terapia individual es un tiempo y un espacio para acoger y escuchar las voces del dolor, el conflicto, la confusión y el desbordamiento emocional que suelen hacerse presente en momentos de crisis en nuestra evolución personal.

El ideograma chino para la palabra crisis esta compuesto de dos símbolos el de peligro y el de oportunidad.

En el ambito psíquico y emocional una crisis es una situación de peligro por cuanto la identidad que nos habia servido con anterioridad para estar presentes en el mundo de una manera significativa y gratificante ya no resulta adecuada para el momento presente. Puede acontecer en relación con nuestra vida laboral, emocional de pareja o a un nivel mas esencial en relación a nuestra identidad esencial ¿Quién soy yo? ... ¿La vida que estoy viviendo es realmente mia o no soy mas que el resultado de complacer expectativas y aprobaciones sociales?...

Pero la crisis es una oportunidad para acceder a un nivel mas profundo de conocimiento de uno mismo y para poder acceder a un nivel de verdad personal mas profundo aprendiendo a diferenciar las voces que hemos introyectado y hecho nuestras pero que no se corresponden con nuestro verdadero yo y nos alejan de una vida mas autentica y gratificante puesto que nos han usurpado nuestros verdaderos deseos, sentimientos, sueños y realizaciones...

La terapia es el espacio donde nos abrimos a escuchar las voces que nos habitan... las voces de la tristeza, desilusión, frustración, descorazonamiento, desgarro emocional o sufrimiento...

Todos estos sentimientos, como portavoces de nuestra alma, nos obligan a poner pie en el suelo y desmontar de nuestra cabalgada inconsciente o alocada para poder escuchar a nuestro verdadero yo que ha quedado sepultado y amordazado bajo las voces de los otros. Todos estos sentimientos dolorosos nos expresan de manera inequívoca que la vida que estamos viviendo no nos satisface, que no estamos viviendo nuestra propia vida y por tanto que hemos de buscar nuestro propio camino... La tarea mas valiosa que podemos realizar con el regalo de nuestra vida

El consumo de alcohol, tabaco y cannabis ha disminuido

El consumo de alcohol, tabaco y cannabis ha disminuido entre la población de 15 a 64 años, mientras que el de cocaína "empieza a estabilizarse", según los datos provisionales de la Encuesta Domiciliaria sobre Alcohol y Drogas en España (EDADES).

Los resultados preliminares del sondeo, con más de 20.000 encuestados y que se hará público antes de que acabe el mes, "confirman la tendencia observada" en la Encuesta Escolar sobre Drogas 2006-07, donde, por primera vez desde 1994, se registró un descenso importante en el consumo de sustancias psicoactivas.

El ministro ha resaltado en su intervención en el Senado que este estudio, realizado entre el último trimestre de 2007 y el mes de marzo de 2008, revela un aumento de la percepción del riesgo y una disminución de la disponibilidad de las drogas ilegales.

Soria ha esgrimido que "nos encontramos en una situación mejor que la existente en 2004", si bien el crecimiento del consumo de cocaína tan sólo parece estabilizarse, cuando España es uno de los países del mundo donde más se recurre a esta droga. En cuanto al alcohol, ha puntualizado que empieza a descender el número de personas que "lo toman a diario" al tiempo que se constata el "descenso paulatino" de la prevalencia del tabaquismo.

El ministro ha comentado que, aunque los datos de las encuestas empiezan a ser positivos, "siempre es necesario ser muy prudentes" en las estimaciones, ya que "bajo ningún motivo se puede bajar la guardia frente a las drogas".

El titular de Sanidad ha apostado por investigar el perfil psicológico del consumidor "para conocer cómo y por qué llegan a las drogas", y se ha mostrado preocupado por "saber qué se meten los jóvenes" cuando consumen determinadas sustancias psicoactivas o "hacen botellón".

El ministro ha recordado que en España el consumo de drogas se produce en un marco de "normalización social". Por esta razón ha insistido en que es necesario poner de manifiesto en el conjunto de la sociedad la realidad de las drogas para "destruir los mitos, por desgracia extendidos", y plantear a los ciudadanos "el problema en términos de salud y bienestar personal".

El libro ( Como tratar los problemas de conducta en el niño )

Cada niño es un pequeño mundo cuya sensibilidad se orienta en función de las experiencias vividas.

Las emociones infantiles son muy intensas, variables e imprevisibles. Timidez, falta de concentración, “berrinches”, depresión y baja autoestima –entre otros–, son problemas frecuentes para los que los autores de este libro –psicólogos de España y Latinoamérica– proponen soluciones y estrategias prácticas.

Esta obra, coordinada por G. Aguilar, presenta una interesante selección de artículos sobre los temas mencionados anteriormente con la finalidad de orientar a padres y maestros de niños, con edades a las que es posible prestar atención emocional, sobre la importancia de detectar e identificar oportunamente los problemas conductuales y emocionales de sus hijos o alumnos.

En este sentido, el libro analiza el origen y las características de los trastornos emocionales infantiles para que el lector adquiera la preparación necesaria para intervenir y ayudar a los niños, siempre y cuando la situación emocional de éstos no requiera la intervención profesional de un psicólogo o psiquiatra.

Como tratar los problemas de conducta en el niño

Guía práctica para detectar y afrontar los trastornos emocionales
AGUILAR GUIDO
Nº PÁG: 238
Fecha edición: enero de 2005

Obsesión por la piel dorada

Un trabajo indica que el 25% de los universitarios de EEUU es adicto al bronceado
La edad media para empezar a ir a una cabina de rayos uva se sitúa en 17 años

Las relaciones obsesivas terminan siendo perjudiciales. Hay innumerables ejemplos en el amor, en la amistad, en el trabajo… y ahora también entre los admiradores del Dios Ra, el Dios del Sol en la mitología egipcia.



Los expertos alertan de un fenómeno creciente y preocupante: la adicción excesiva al tono moreno, que los medios han bautizado como tanorexia (de la palabra inglesa 'tan', que significa broncearse).

"Una encuesta realizada a 400 estudiantes de la Universidad de Virginia ha desvelado que hasta un 27% de ellos podría considerarse tanoréxico" declara a elmundo.es la doctora Carolyn Heckman, del Centro de Cáncer Fox Chase y autora de un estudio sobre el tema que publica 'American Journal of Health Behavior'. "Y lo más sorprendente es que el 40% de estos adictos consigue su objetivo en cabinas de rayos UVA que empiezan a utilizar con tan sólo 17 años", añade.

Para esta experta y sus colegas de investigación, de diversos centros estadounidenses, esta obsesión por conseguir una piel dorada es peligrosa, "ya que muchas personas no se protegen lo suficiente de los rayos solares y ultravioletas, porque creen que así se van a broncear más rápido, y pueden sufrir fotoenvejecimiento prematuro o, lo que es peor, cáncer de piel".

De hecho, este tipo de tumor es uno de los más frecuentes y se calcula que se diagnostican dos millones de casos nuevos al año en el mundo, de los cuales el 90% se debe a las radiaciones ultravioletas. "Deberíamos hacer campañas de prevención más agresivas, porque parece que la gente sigue sin ser consciente de los efectos dañinos del sol", dice Heckman.

Para su estudio, los autores realizaron un cuestionario que incluía preguntas relacionadas con la exposición al sol y la asistencia a centros de rayos UVA, el uso de cremas protectoras, con factores relacionados con la salud como el índice de masa corporal y también sobre otros hábitos como el consumo de tabaco o alcohol.

Sus resultados indican que la cuarta parte de los participantes podría incluirse dentro de la categoría de los tanoréxicos, que la mayor dependencia la generan las máquinas de rayos UVA –que llegan a utilizar hasta 14 veces al año-, más que broncearse en el exterior y que son los individuos de raza blanca, delgados y fumadores los que más riesgo tienen de sufrir esta adicción.

"El hecho de que las personas delgadas sean más propensas a la tanorexia tiene que ver con que están más acostumbradas a mostrar su cuerpo sin complejos y se ven bien en bikini, algo que no ocurre con todas las personas obesas, que al no sentirse a gusto con su cuerpo prefieren no bajar a la playa o no exponerse demasiado al sol", indica la profesora del centro Fox Chase.
Los factores de la dependencia

Aunque la comunidad médica no ha aceptado aún el término tanorexia, que lo vincula con trastornos como la anorexia nerviosa, sí que advierten que es un fenómeno que hay que vigilar de cerca. Asimismo, son varios los especialistas que han formulado teorías sobre los factores biológicos que influyen en esta adicción.

Una de las teorías, recogidas en la investigación de Heckman, indica que uno de los posibles mecanismos que explicarían la tanorexia es que durante la exposición a los rayos ultravioletas el organismo libera endorfinas, que hacen al individuo sentirse bien. Una sensación similar a la que experimentan con el consumo de ciertas drogas. Varios trabajos científicos han investigado esta línea.

Para Heckman, "existen varias similitudes entre la adicción al bronceado y el abuso de sustancias, como que ambas son más prevalentes entre la juventud, están asociadas a un factor social que favorece relacionarse con otros y tienen riesgos para la salud conocidos por todos".
El culto a la apariencia

Los investigadores reconocen que es la apariencia la motivación principal para caer rendidos bajo los rayos del astro rey o de las lámparas violetas, pero no la única. El efecto relajante y la facilidad para relacionarse con otros cuando se está bien con uno mismo también se encuentran entre las razones argumentadas por los tanoréxicos.

Entre los síntomas para reconocer está nueva adicción, los especialistas citan la ansiedad que genera en la persona perder una sesión de sol o de rayos UVA y el hecho de que nunca se ven suficientemente morenos.

Sonia, peluquera de profesión, se ha acostumbrado a verse bronceada. Sabe que la ropa le sienta mejor, que puede atreverse con todos los colores de su armario y que el espejo no miente y le recuerda a diario que está más guapa con ese tono. Por eso, está decidida a conservar, mediante lámparas de rayos UVA, el dorado que ha conseguido este verano en las playas de Cádiz, como ya ha hecho en años anteriores.

"No creo que sea una adicta, pero es cierto que ya no me veo bien si estoy blanca", reconoce a elmundo.es. Su hermana Vicky, con la que comparte trabajo, es de la misma opinión. "Sé que morena estoy más guapa y si puedo estar morena todo el año, ¿por qué no lo voy a hacer?", dice.

Los autores advierten que la 'tanorexia' se ha visto incrementada en los últimos tiempos por la "reciente explosión en las revistas de imágenes de famosos con cuerpos bronceados y por el aumento del número de salones dedicados al moreno artificial".

Psicologia Juridica

Algunas áreas de intervención y de investigación de la psicología nacen del propio ámbito de nuestra disciplina en cuanto ciencia, mientras que otras nacen de la necesidad de intervención en determinados ambientes.

Así, mientras que áreas tan reconocidas y clásicas como la psicología social, la psicología evolutiva o la psicobiología comienzan su andadura fundamental por caminos académicos y no tanto por la necesidad de intervención, y sin menospreciar cómo la aparición de hechos sociales cruciales determinan su crecimiento, otras psicologías, como la del trabajo, la comunitaria o la psicología jurídica, se desarrollan fundamentalmente ante demandas sociales claras.

Y aunque es innegable que todo psicólogo de la intervención busca sus conocimientos en la psicología como disciplina científica, la forma de hacerlo y de retomar determinados conocimientos posee peculiaridades que le distinguen del ámbito puro del científico y del académico. Dichas peculiaridades se manifiestan aún con mayor intensidad en el caso de la psicología jurídica, ya que, salvo en muy contadas ocasiones, la labor del mismo debe adaptarse a la ley, y no sólo eso, sino que en gran parte de las ocasiones debe actuar para que se respete la ley tal y como está escrita; su labor debe ser acorde con la ley, e incluso habitualmente debe estar pautada su actuación por ella.

Este «sometimiento» de la psicología al campo de lo jurídico ha supuesto que no pocos autores hayan argumentado que la psicología y el derecho no poseen, hoy por hoy, un campo de intersección que se pueda denominar como psicología jurídica, sino que se debería hablar más bien de psicología aplicada al campo del derecho, o de derecho que contemple características psicológicas. Y pensándolo bien, las formas de unión de ambas disciplinas para formar ese campo de unión son difíciles: la psicología es una ciencia, y una ciencia hipotético-deductiva; utiliza el paradigma experimental, y fundamento sus estudios en la obtención de una fiabilidad y validez suficiente.

El derecho no se preocupa de nada de eso; es una forma de pautar las acciones humanas, guiada por unas determinadas filosofías donde el concepto de «hecho» no tiene nada que ver con algo experimentalmente probado, y para el que en la mayoría de las ocasiones las formas experimentales de comprobación de hipótesis no son sino procedimientos ética y jurídicamente inadmisibles. Y, sin embargo, y con dolor para los amantes de lo científico, lo válido socialmente y lo que posee valor de cambio en la realidad es lo que procede del derecho y no lo que se apoya en procedimientos científicos. Lo que muchos psicólogos calificaríamos de «palabrería» por falta de evidencia, si es ley vale más que una realidad contrastada a un determinado nivel de confianza.

Muchas serían las causas de esta contradicción, y no estaría exento ni el universo político ni la clase social que crea la ley de ese posible discurso explicativo; pero centrándonos en la psicología jurídica, qué duda cabe de que hoy los antecedentes cercanos se remontan al principio de nuestro siglo, cuando en Estados Unidos y en Alemania comienza a entreverse la posibilidad de que el psicólogo intervenga en el sistema de justicia como mero técnico externo y con actuaciones única y exclusivamente individuales y clínicas, sobre todo dentro de las prisiones. Así se abre la necesidad de contar con el psicólogo en las tres instancias de control social que posee el sistema jurídico: la policía, los tribunales de justicia y las instancias de reforma y tratamiento (cárceles, centros de menores, etc.). Analizaremos en primer lugar la labor del psicólogo en estas tres instancias clásicas, para después analizar otros campos.

De estas tres instancias de control, aquélla que ocupa a menos psicólogos es la que hace referencia a la policía; tareas como la selección de los policías, su formación, la planificación de sus planes de estudio, su entrenamiento (por ejemplo, para proporcionar una buena atención al público, para la toma adecuada de las denuncias, para soportar adecuadamente situaciones de estrés, etc.), la realización de estudios de imagen frente a la Comunidad y miles de tareas más, la mayoría de ellas realizándose desde hace tiempo en otros países industrializados y comenzándose a realizar desde hace poco en el nuestro.

Hoy las diversas policías poseen escuelas y centros de formación donde se atienden estos aspectos, como es el caso de la Academia de la Policía Nacional en Avila, del centro de la Guardia Civil en Valdemoro, de la Academia de la Policía Vasca en Arkaute o de los centros de formación de la Policía Municipal madrileña; es decir, tanto por parte de las policías nacionales como de las autonómicas y de las locales existe una preocupación por el tema, preocupación que asimismo se contempla en el Ejército.

En cualquiera de los casos pocos psicólogos en nuestro país trabajan dentro de este área; se trata de un mercado de trabajo demasiado cerrado y exclusivo en el que se admite habitualmente al psicólogo que ya previamente era miembro de la institución; así no pocos psicólogos de la policía eran antes comisarios, argumentándose por parte de algunos de ellos que hay que pertenecer a la institución para comprenderla. Los que no pertenecen a dichos cuerpos investigan temas policiales o bien desde determinadas instituciones académicas o desde otras de tipo oficial (como desde el Instituto de la Mujer en el tema de las denuncias de malos tratos), o de apoyo a determinados sectores de la población (como la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas).

Si nos centramos en el universo de los Tribunales de justicia, la labor del psicólogo, si bien no muy destacada, adquiere una mayor importancia tanto numérica como de reconocimiento y conocimiento social. El tema clave es aquí el del peritaje psicológico, que si bien suele referirse a los procesos de separación y de divorcio, se emplea en todos los campos del derecho; en el penal, en el del trabajo, en el administrativo, civil, etc., este tipo de peritajes se pueden realizar a petición de los interesados o de sus abogados, o bien por petición de jueces y fiscales.

Para todos estos casos dispone la Delegación de Madrid del COP, a través de la Sección de Psicología Jurídica, de una especie de «turno de oficio», de forma que se propone a quien lo solicite una terna de tres psicólogos, de los que por insaculación se determina quién efectuará el peritaje; en cualquier caso, este servicio no suele ser utilizado por los jueces y los fiscales, ya que la Administración de justicia suele recurrir a sus psicólogos de los Juzgados de Familia, de los juzgados de Menores y de las Clínicas Médico- Forenses, que hace ahora algo más de un año pudieron ocupar sus puestos como personal laboral según una convocatoria del Boletín Oficial del Estado que se vuelve a repetir todos los años, consolidando así esta situación profesional.

Desde el ámbito fundamentalmente privado se llevan a cabo por multitud de psicólogos procesos de mediación entre las personas que desean separarse y divorciarse de forma que se llegue a acuerdos que el juez ratifique sin necesidad de procedimientos litigiosos a veces casi interminables; se prepara psicológicamente a las partes para afrontar juicios que les suponen una serie de vivencias emocionales fuertes; se preparan defensas desde el punto de vista psicológico, etc.

Y desde un punto de vista más relacionado con la investigación, profesionales que suelen proceder de la Universidad estudian y asesoran temas como los procesos de memoria y de evidencia en los testigos, de reconocimiento de personas, de toma de decisión judicial, de características y requisitos para la implantación de los jurados, de cómo se internaliza la ley para conseguir que sea respetada y un sinfín más de temas.

Pero abordemos la última instancia de control social formal: las instituciones de reforma y de tratamiento (y para ello no nos detendremos en esa misma etiqueta, es decir, más vale no preguntarnos si realmente reforman, o si realmente tratan, o si deben perseguir tales fines o no, o si es lógico pensar que es la institución la que lo va a conseguir), es decir, de los centros para menores (tanto de acogimiento, como de tutela o de reforma) y de las prisiones (tanto de preventivos como de penados, y en sus diversos niveles y grados de seguridad). La posición del psicólogo en este tipo de ambientes es la más consolidada de todas las citadas de forma que éste, según algunos, es el que se reparte la «tarta penitenciaria» del país, junto con los criminólogos.

Comenzando por el tema de los menores, y sin entrar en el auténtico desbarajuste de competencias entre Ayuntamientos, Comunidades Autónomas y la Dirección General de Protección Jurídica del Menor del recientemente creado Ministerio de Asuntos Sociales, se está llevando a cabo cada vez con mayor frecuencia la puesta a punto de programas psicológicos de reinserción de jóvenes, de organización de los propios centros, de búsqueda de medidas alternativas al centro cerrado, de investigación de alternativas de otros países para su implantación en el nuestro, etc.

Y desde el campo de la prisión, hoy todavía la labor del psicólogo se reduce en gran medida a la clasificación penitenciaria (determinar si un interno debe estar en primer grado o de máxima peligrosidad, segundo, o en régimen abierto), a la autorización de permisos junto con la junta del centro, etc.; pero también cada vez son más los programas psicológicos que se implantan para mejorar el clima social de los centros para motivar a los internos hacia el estudio y la utilización de talleres, a prepararle para su reinserción en la sociedad (sobre todo a través de las denominadas Comisiones de Asistencia Social, que suelen mantener convenios con el INEM y con los Ayuntamientos), etc.; en todas estas labores suelen estar presentes profesionales de la Escuela de Estudios Penitenciarios que se dedican también a la formación del psicólogo que va a trabajar en la prisión.

Ya habíamos comentado en un primer momento que la labor del psicólogo en el campo jurídico no se limitaba sólo al campo de las instancias de control social formal. Cada vez abundan más los profesionales que trabajan en la calle y en el barrio, realizando labores de prevención de la delincuencia, tratando de -desde la convivencia con los chavales y con sus amigos y familia- evitar que se vean envueltos en problemas con la ley. Hoy día estas opciones funcionan y están incluso contempladas dentro de los programas de actuación de la Comunidad de Madrid, de los Ayuntamientos, etc.

Los psicólogos que trabajan en este tipo de puestos aún están a la búsqueda de su propia definición del trabajo a desempeñar; pero qué duda cabe de que sólo una labor preventiva dentro de la propia comunidad puede evitar, a largo plazo, el ascenso descontrolado de las tasas de delincuencia. También en este último campo, al igual que en todos los anteriores, trabajan multitud de profesionales del ámbito de la Universidad, a menudo en colaboración con instituciones oficiales.

Y para cerrar estas breves líneas comentar la labor realizada y por realizar de la Sección de Psicología Jurídica de la Delegación de Madrid de nuestro Colegio, que desde su creación hace un par de años se ha preocupado constantemente de la formación de los psicólogos que desean trabajar en este campo (mediante cursos, seminarios, ciclos de conferencias), ha creado el ya mencionado «turno de oficio» de psicólogos, y próximamente piensa crear, conjuntamente con una universidad, un Máster en Psicología Jurídica, así como promover publicaciones sobre el tema (tanto revistas como libros), jornadas, actos de dar a conocer al psicólogo jurídico a la sociedad y un sinfín más de actividades.

El lado positivo de la Depresión

Antes de la aparición de "Joe, el plomero", flamante celebridad de la campaña presidencial de Estados Unidos, ya habíamos tenido al "plomero polaco", estrella del referéndum francés de 2005, que logró que la tan anunciada Constitución de la Unión Europea (UE) se fuera por los caños.

El plomero Jozef (aunque en realidad no tuvo nombre propio) era el mítico trabajador polaco que iba a aprovechar la integración europea para mudarse a Francia y robar empleos. Mais non! Una mayoría del 55% de los franceses se encargó de que no sucediera.

No estoy muy seguro del efecto que pueda tener Joe Wurzelbacher, de Ohio, en las elecciones de Estados Unidos, pero ahora hay algo que sabemos a ciencia cierta: no hace falta ser plomero matriculado para volverse famoso.

Con el tiempo, serán los departamentos de sociología de la Sorbona o de Stanford los que se ocuparán de este tema de plomería franco-estadounidense. Mientras tanto, llegó la hora de que cada uno empiece a sacar el plomero que lleva dentro.

Yo al mío lo tengo reprimido. Pero un grito ahogado desde lo más profundo de mi psiquis me dice que ahora hacer dinero con pedazos de papel ha pasado de moda y que hacer dinero haciendo cosas (como arreglar las cañerías) está de vuelta, esta invasión de plomeros refleja un movimiento de regreso a lo básico.

Los derivados y los seguros contra default son un bajón. Así que he decidido ver el lado positivo de la Depresión.

Uno quizás hasta pueda disfrutar de una fiesta en Nueva York sin que nadie mencione el creciente valor de su propiedad. La fiebre del BlackBerry, otro obstáculo para disfrutar de la velada, también debería calmarse.

Se pondrán de moda los consejos útiles sobre cómo utilizar el saquito de té dos veces, dónde comprar una caja fuerte económica y cómo criar pollos en el dormitorio.

Quizás hasta la cortesía volverá a estar de moda cuando descubramos nuestra humanidad compartida en la fila para comprar comida: ya nadie ocupará tres asientos en el subterráneo. El nuevo homeless look será un furor, y con tanto tiempo entre manos la gente incluso volverá a leer los diarios. Habrá más lugar en los aviones y menos miradas sobradoras de viajeros frecuentes de primera clase.

Es hora de aceptarlo: las pesadillas (la guerra, el totalitarismo y la desaparición de los planes de jubilación) son un excelente tema de conversación.

Cuando el comunismo se derrumbó en Europa, cientos de millones de personas abrazaron la libertad, pero lamentaron la muerte de un discurso interesante.

El ingenio adora la adversidad. Escucharemos más risas, mejor música, y menos frases de Sarah Palin. Pero no me hagan engranar. Peggy Noonan ya dijo todo lo que hay que decir de Palin en The Wall Street Journal : "No es que piense en voz alta. Ella simplemente...dice las cosas."

Ese es el american way , decir las cosas. En la Unión Soviética (y recordemos que ese tipo de capitalismo monopólico del Estado que hoy promueve Henry Paulson era para Marx la última etapa en el camino hacia el paraíso obrero) hacían chistes sobre las diferencias entre la Constitución de Estados Unidos y la soviética. La respuesta: las dos garantizan la libertad de expresión, pero la de Estados Unidos también garantiza la libertad después de expresarse. O lo hacía antes de que Dick Cheney la ?retocara? para la era posterior al 11 de Septiembre.

Le pedí a Jy Murphy, un actor amigo mío, que pensara las posibles ventajas de la Depresión. Me envió lo siguiente: "La gente podrá dejar de preocuparse por la bolsa y pasar más tiempo muriéndose de hambre con su familia. Es probable que también haga bajar el índice nacional de obesidad. Cada vez más gente utilizará el transporte masivo, como los vagones de carga de los trenes. Y cuando la Depresión termine, ¡estaremos listos para ganar otra guerra mundial!".
Fuente lanacion.

El estrés puede causar o incrementar los picores en la piel

Recientes investigaciones sugieren que el estrés puede activar las células inmunes en la piel, causando o acentuando enfermedades inflamatoria cutáneas, según los estudios de la Universidad de Medicina de Berlín publicados por la revista 'American Journal of Patology' .

Según estos estudios, el estrés puede desencadenar brotes en pacientes que sufren enfermedades cutáneas inflamatorias.

Hasta el momento, los estudios habían determinado que la percepción del estrés se mide a través de la relación entre la piel y el cerebro.

Sin embargo, poco se sabía sobre los medios por los que el estrés agrava las enfermedades de la piel.

En este sentido, los investigadores dirigidos por el doctor Petra Arck, de la Universidad de Medicina de Berlín y de la Universidad canadiense McMaster, lanzaron la hipótesis de que el estrés puede endurecer las enfermedades de la piel por un aumento del número de células inmunes.

Al probar esta hipótesis en ratones expuestos a grandes dosis de estrés, el doctor Arck consideró que este estrés dio lugar a un mayor número de glóbulos blancos sobre la piel. Además, el estrés activó las células inmunitarias, que son fundamentales en la puesta en marcha y perpetuación de las enfermedades de la piel.

Los próximos estudios del grupo de investigación del doctor Arck se centrarán en cómo evitar este estrés mediante el reconocimiento de las personas en situación de riesgo y en la identificación de las células inmunitarias adecuadas para ser objeto de intervenciones terapéuticas.

Los adolescentes con problemas mentales

La depresión y la ansiedad elevan el riesgo de engancharse a la Red.

Si su hijo es taciturno, se aísla, no está interesado por el sexo ni por las relaciones sociales y se muestra frío, seguramente él sea la razón de que su línea ADSL esté echando humo a todas horas.

Un nuevo estudio constata que los adolescentes con ciertos trastornos de personalidad y problemas de relación prefieren los amigos virtuales a los reales.

Puede que, en parte, porque en la Red no se ven inmediatamente excluidos ni rechazados por sus dificultades para comunicarse o entablar amistad.

Vijay Mittal, del departamento de Psicología de la Universidad Emory (en Atlanta, EEUU), ha llevado a cabo un estudio que constata que tanto los adolescentes con el trastorno esquizotípico de la personalidad (TEP), como los que padecen otros problemas mentales, dedican poco tiempo a las relaciones sociales pero, a cambio, pasan más tiempo en chats o en juegos on-line en comparación con los chavales mentalmente sanos.

Los afectados de TEP, el 1% de la población, son aquéllos que ni desean ni disfrutan con las relaciones sociales, muestran frialdad emocional, no suelen tener amigos y tampoco manifiestan interés por las relaciones sexuales.

"Este trastorno no se debe confundir con la esquizofrenia. En general, son personas que se comportan de forma un poco extraña y tienen creencias poco comunes (supersticiones, brujería...) a las cuales se adhieren tan fuertemente que se aíslan y no tienen relaciones interpersonales normales", señala a elmundo.es Manuel de Gracia Blanco, del departamento de Psicología de la Facultad de Ciencias de la Educación (Universidad de Gerona).

Precisamente, este experto, en colaboración con el Departamento Lenguajes y Sistemas Informáticos de la Universidad Politécnica de Cataluña, ha liderado recientemente un estudio que confirma la relación entre problemas mentales y el uso de Internet. El trabajo ha sido realizado tras difundir un cuestionario 'on line' durante cuatro semanas, al que respondieron 1.664 internautas. "De todos ellos un 4,9% reconoció tener problemas frecuentes relacionados con el uso de internet", señala el estudio, publicado en la revista 'Anales de Psicología'.

Estos conflictos hacen referencia principalmente a perder la noción del tiempo cuando se está enganchado al ciberespacio; robarle dedicación a los estudios o al trabajo y perjudicar las relaciones con la familia o los amigos por la obsesión por navegar. "Los que confiesan sufrir estas consecuencias son además los que presentan mayores niveles de ansiedad y disfunción social", confirma el ensayo español.

"El uso de Internet se ha asociado a síntomas psiquiátricos. Hay bibliografía que establece que aquéllos que pasan demasiadas horas al día en la red durante las jornadas no laborables sufren enfermedades mentales. Existen también estudios que constatan que los jóvenes que reconocen sentirse más solos son los que dedican su ocio al ciberespacio", aclara el doctor Mittal.

Enganchados al chat pero no al e-mail
En este sentido, y tras comparar el uso diario de la Red en 19 adolescentes de entre 12 y 18 años afectados de TEP con otros 22 chavales con otros problemas de personalidad y con otros 28 mentalmente sanos, los autores han constatado que los menores con más sintomatología del trastorno esquizotípico eran los que invertían más tiempo chateando.

"Teniendo en cuenta los déficits sociales observados en el TEP, se sospechaba que los adolescentes con el trastorno pasan una mayor cantidad de tiempo en Internet. Los resultados obtenidos por el trabajo estadounidense apoyan esta hipótesis", recuerda Manuel de Gracia Blanco.

La única excepción a este patrón de un uso abusivo de la Red por parte de los chavales con TEP es el correo eléctronico, donde no se encontraron diferencias entre los tres grupos de participantes. Este hecho se explica porque se requiere de una red social de amigos previa para poder mandar e-mail.

"En la medida en que las relaciones sociales de los adolescentes con TEP son limitadas, también lo serán las opciones de relacionarse a través del correo electrónico con personas conocidas", insiste el profesor de Gerona.

Perfil de riesgo
Para este especialista la novedad del ensayo liderado por Mittla "reside en relacionar patrones conductuales de uso de Internet y un determinado trastorno de la personalidad. El trabajo completa los estudios ya existentes sobre otras patologías psiquiátricas y el uso de la Red, sobre todo en población adolescente".

Precisamente, otra investigación reciente realizada en Corea del Sur "uno de los países, junto a Taiwán, donde más se está estudiando el empleo de la Red, ha establecido un perfil de riesgo en el uso abusivo de Internet por adolescentes con mayores niveles de depresión, ansiedad o aislamiento social. Aunque la llamada adicción a internet, más que una causa parece una consecuencia de dichos trastornos", agrega Manuel de Gracia Blanco.

Tanto este experto como los autores de los trabajos mencionados llaman la atención sobre la necesidad de establecer estrategias efectivas para identificar a los chavales con problemas mentales que tienen más riesgo de convertirse en ciberadictos con el fin de prevenir problemas más graves en un futuro.
Fuente elmundo.es

Cocaína se resiste a los planes antidroga

El porcentaje de los que toman esta droga sigue estancado en España
El consumo diario de alcohol y tabaco, por el contrario, es el más bajo en diez años

Los clientes del cannabis se reducen, los de cocaína, no. Cada vez son menos los que se atreven a fumar marihuana; el consumo diario de tabaco y alcohol se sitúa en sus índices más bajos de los últimos diez años; o la heroína sigue siendo una droga marginal. Sin embargo, la cocaína se resiste a los planes puestos en marcha por las autoridades.

Según la 'encuesta domiciliaria 2007/2008', presentada hoy por los ministros Alfredo Pérez Rubalcaba y Bernat Soria, el consumo de cocaína se mantiene estable en sus niveles más altos desde que comenzó a hacerse un seguimiento continuado dentro del Plan Nacional sobre Drogas (1995). El 3% de los españoles entre 15 y 64 años ha consumido esta sustancia en los últimos doce meses. Hace doce años, lo hacía el 1,8%.

Tal y como se ha encargado de recordar el titular de Sanidad, "España tiene el dudoso récord de encabezar los países donde mayor es el consumo de esta sustancia". Sin embargo, Soria no ha podido establecer una razón por la que esta sustancia —a diferencia del resto— no disminuye, y eso que es una a las que más fondos y planes se dedica.

Quizá siga pesando mucho la percepción colectiva de que los 'polvos blancos' son una "droga de éxito social" —a diferencia de la heroína, más vinculada al fracaso y la marginalidad—. "Es cierto que el consumo de cocaína es más social y que existe una mayor percepción de que el consumidor controla más", asegura Marta Giménez, ex directora de la Comunidad Terapéutica de Barajas, una residencia para la desintoxicación de pacientes desestructurados, dependiente del Ayuntamiento de Madrid.

Un dato esperanzador:
Los cocainómanos, según Giménez, no perciben su deterioro físico tan rápido como los heroinómanos —por lo que tardan más en admitir su adición—. Eso sí, en los últimos años (ella abandonó esta Comunidad Terapéutica hace un año) habían visto un incremento en el número de adictos "puros" a esta sustancia —es decir, que no eran politoxicómanos—, y cada vez más jóvenes (entre 20 y 30 años).

El único dato positivo sobre el consumo de esta sustancia es que ha bajado el porcentaje de ciudadanos que repiten después de su primera 'esnifada'. Si en 1995, más de la mitad (52,9%) de los que probaban una raya, repetían durante los siguientes doce meses, en 2007, ese porcentaje se ha reducido al 37,5%, lo que supone 5,4 puntos menos que en 2005. Para Soria, este es un dato "esperanzador".

El consumo diario de alcohol, el más bajo en diez años

El resto de la encuesta muestra la cara más positiva de los planes antidroga desarrollados en los últimos años.

Los fumadores esporádicos de cannabis se reducen con respecto a años anteriores (10,1% lo hicieron en los últimos doce meses; el 27,2%, alguna vez en su vida).

El consumo diario de tabaco y alcohol es el más bajo de los últimos diez años. Además, entre los consumidores de alcohol, también se registra una reducción (del 5,5% al 3,4% en un año) en el colectivo de 'bebedores de riesgo' —los hombres que se toman tres wiskis al día, dos en el caso de las mujeres; o un litro de cerveza al día, 3/4 en las mujeres—.

Para los autores de esta encuesta, existe una relación estrecha entre esta reducción y dos medidas concretas puestas en marcha por los Ministerios de Sanidad y del Interior: la ley antitabaco y el mayor número de controles de alcoholemia. Si en 2003, el 3,94% de los más de 1.700.000 controles daba positivo, en 2007, haciéndose más del doble de controles (3.759.574), dieron positivo el 2,15% de los conductores. "Todo está relacionado: existen más controles, eso genera en la población una mayor percepción de riesgo, consecuentemente se consume menos", según el ministro de Sanidad.

La edad de inicio en el consumo de todas las drogas ha aumentado ligeramente (a los 16,8 años en el caso del alcohol, a los 21,7 con la heroína). Además, los ciudadanos perciben que es más difícil ahora conseguir drogas. Esto puede estar relacionado, según Rubalcaba, "con el mayor control y presencia de agentes policiales" en los puntos de venta.
Fuente soitu.es

Síndrome de estrés postraumático

El síndrome de estrés postraumático es un trastorno psiquiátrico que aparece en personas que han vivido un episodio dramático en su vida (guerra, secuestro, muerte violenta de un familiar...).

En las personas que lo sufren son frecuentes las pesadillas que rememoran la experiencia trágica vivida en el pasado.

Hay que observar que no se incluyen dentro de estos desencadenantes situaciones difíciles, pero propias de la vida “normal”, como un divorcio, la muerte de un ser querido, enfermedad, conflictos familiares o reveses económicos.

Síntomas
Dentro del síndrome por estrés postraumático, los expertos distinguen entre el tipo agudo, que se manifiesta durante el primer mes hasta los tres meses después del trauma, y el tipo latente que puede aparecer por lo menos a los seis meses desde el hecho desencadenante. En algunos casos, la aparición de los síntomas puede producirse décadas más tarde. Estos son los más característicos:

* Rememoración del trauma (flashbacks), pesadillas o recuerdos instantáneos e involuntarios en cualquier momento del día.

* Alucinaciones con la idea de que se repite el hecho traumático.

* Ansiedad extrema al entrar en contacto con las personas, lugares o cualquier circunstancia que recuerde el trauma.

* Palpitaciones, dificultad para respirar, sudor cada vez que se recuerda el hecho desencadenante.

* Evitar conversaciones, lugares, personas, en general cualquier cosa que pueda relacionarse con el trauma.

* Incapacidad para recordar detalles importantes del hecho.

*Sentirse psíquicamente distante, entumecido y paralizado ante cualquier experiencia emocional normal.

* Creer que la vida va a ser más corta de lo que lógicamente se espera.

* Perder el interés por la aficiones y diversiones.

* Mostrar signos de hiperactividad: dificultad para dormir, irritabilidad, incapacidad para concentrarse o alarmarse con mucha facilidad.

Los síntomas duran un mes como mínimo y afectan la capacidad del paciente para retomar su vida normal tanto en casa, como en el trabajo o en las situaciones sociales. No importa el tiempo que haya pasado desde que se produjo el trauma. El síndrome puede aparecer años después.

Prevención
Existe la evidencia de que las personas traumatizadas que reciben apoyo psicológico y consejo especializado inmediatamente después de sufrir el episodio desencadenantes son menos propensas a padecer el síndrome de estrés postraumático, comparadas con las que no reciben ningún tipo de ayuda. Por eso se recomienda que tras un trauma se recurra a algún profesional especializado.

Tratamientos
El tratamiento es a largo plazo, lo que explica el alto grado de abandono de la terapia. Se estima que el 75 por ciento de los pacientes tratados lo abandona. El tratamiento se basa en una combinación de fármacos y psicoterapia. Los fármacos empleados se dirigen a los diversos síntomas del síndrome, teniendo en cuenta los más acusados. Los medicamentos que suelen prescribirse son antidepresivos y ansiolíticos. La psicoterapia se encamina a desarrollar técnicas de relajación, como aprender a respirar correctamente ante una crisis provocada por el síndrome. Este tratamiento se puede combinar con métodos cognitivos para racionalizar los hechos traumáticos y también con terapia de choque, por la que se recrea la situación vivida para ayudar a la víctima a superarla y a perder el miedo que le produjo.

Otros datos
La mayoría de las personas que han sufrido un trauma no llegan a padecer el estrés postraumático, un hecho que todavía no tiene explicación. Además y al contrario de lo que se cree, la gravedad del síndrome no depende de la naturaleza del trauma que lo desencadena. La reacción a una situación dura e inusual depende mucho de la sensibilidad de las personas afectadas y de sus recursos para afrontar los traumas. En parte esto se encuentra determinado por las características genéticas de cada uno, pero también influye la personalidad y la situación vital concreta que esté atravesando, si ha sufrido o no otros traumas en el pasado o el tejido familiar y social que pueda apoyarle. Puede aparecer a cualquier edad, aunque suele ser más frecuente entre las personas jóvenes, quizá porque tienen más posibilidades de exponerse a los traumas desencadenantes. También es más común en aquéllos individuos socialmente aislados.

Impotencia

Para que ocurra la erección deben suceder varios eventos en una secuencia determinada. Cuando esto no sucede no hay erección.

La secuencia se inicia con impulsos nerviosos originados normalmente en primera instancia en el cerebro y que son transmitidos a lo largo de la médula hasta los nervios del pene.

Estos impulsos nerviosos originan reacciones en las estructuras vasculares que irrigan los órganos sexuales masculinos, así como ciertos músculos y algunas glándulas.

La lesión de cualquiera de estas estructuras puede originar trastornos de la erección y franca impotencia.

Algunas enfermedades que suelen causar dificultad erección son:

Diabetes

Enfermedades renales

Alcoholismo crónico

Esclerosis múltiple

Ateroesclerosis

Enfermedades vasculares

Enfermedades neurológicas

También pueden causar impotencia la cirugía de próstata y de la vejiga, lesiones de la médula espinal, heridas pélvicas, los antihipertensivos, antihistamínicos (antialérgicos) antidepresivos, el tabaco, corticoides, tranquilizantes, supresores del apetito y la cimetidina (antiulceroso) y los medicamentos que reducen la producción de testosterona.

Cuando no se puede diagnosticar su origen, se asume que el origen de la impotencia es psicológico. Como la mayoría de diagnósticos de impotencia son incompletos, la mayoría de pacientes con impotencia terminan recibiendo tratamientos puramente sintomáticos, usualmente de por vida y con graves efectos secundarios.

VIOLENCIA Y ESQUIZOFRENIA

La mayoría de los pacientes con esquizofrenia no son violentos, sin embargo existe una sensibilización especial hacia los actos violentos producidos por personas que presentan una enfermedad mental.

El hecho de que la violencia en los pacientes esquizofrénicos pueda ser arbitraria, imprevisible, extraña y sin aparente sentido, angustia a la sociedad y genera una actitud en ésta de cautela y recelo hacia estos pacientes. En un editorial del Archives of General Psychiatry se apunta: “Es más tranquilizador saber que alguien fue asesinado a disparos en el asalto de una tienda que apuñalado hasta la muerte por un enfermo mental”.


Es cierto que la agresividad se ha asociado con la enfermedad mental desde tiempos pretéritos. Sócrates mantenía que el número de locos en Atenas no podía ser muy alto puesto que la tasa de violencia era muy pequeña.

Con el proceso de desinstitucionalización psiquiátrica, que comienza en Italia aproximadamente en 1961 en un intento de humanizar el tratamiento que recibían estos pacientes y favorecer la reinserción social, se observó que algunas personas recluidas en prisiones eran enfermos mentales que podían beneficiarse de un adecuado tratamiento. Los estudios realizados antes de este periodo revelaban cifras de violencia más bajas entre enfermos mentales que entre la población general, consecuencia lógica ya que la mayoría de pacientes estaban recluídos.

En el momento actual los estudios realizados indican que no existe acuerdo con respecto a la incidencia de conducta violenta y delictiva en la esquizofrenia, probablemente por problemas metodológicos de dichos estudios (falta de definición de violencia, de escalas validadas, inclusión de pacientes con diagnósticos distintos, ingresados o ambulatorios).

En todo caso parece razonable que la relación entre esquizofrenia y violencia tenga que ser explicada desde un punto de vista multifactorial. Factores como la edad, situación laboral, violencia en la familia de origen, consumo de tóxicos y violencia previa, son predictores de conducta violenta tanto en la población general como en los pacientes con esquizofrenia.

Sin embargo determinados factores como clase social baja, desempleo y falta de recursos sociales se han asociado a enfermedad mental; además la propia vulnerabilidad de los pacientes con esquizofrenia y la mayor prevalencia de familias mórbidas hace que estos pacientes se encuentren sobrerepresentados en las mencionadas características sociodemográficas.

Estudios realizados teniendo en cuenta los episodios violentos ocurridos tanto ambulatoriamente como en régimen de ingreso, apuntan que de un 10 a un 50% de los pacientes con esquizofrenia son violentos en algún momento a lo largo de su enfermedad y un 3% infringe la ley.

A la vista de estos resultados cabe preguntarse ¿qué circunstancias favorecen la aparición de conductas violentas en el paciente con esquizofrenia? ¿cómo podemos prevenir estas conductas?

¿Qué circunstancias favorecen la aparición de conductas violentas en el paciente con esquizofrenia?

La mayoría de los estudios coinciden en la asociación entre sintomatología psicótica y violencia. La presencia de delirios referenciales o de perjuicio, en los que el paciente se siente amenazado o dañado, y de alucinaciones mandatorias, pueden predecir la aparición de violencia. La violencia se ha relacionado con la sistematización de los delirios, la temática de éstos, la implicación afectiva del sujeto y la cualidad de las alucinaciones.

La falta de conciencia enfermedad o insight puede aumentar el riesgo de violencia. Si el paciente está convencido de la creencia de sus ideas delirantes y no las identifica como síntomas de la enfermedad, será más proclive a actuar de acuerdo con éstas.

Además los pacientes con menor conciencia de enfermedad tienen una menor adherencia terapéutica y rechazo de la medicación prescrita, lo que conduce a presentar mayor número de recaídas por intensificación de los síntomas psicopatológicos, que podría traducirse en mayor riesgo de conductas violentas.

El consumo de tóxicos en pacientes con esquizofrenia exacerba los síntomas psicóticos y aumenta el riesgo de conductas violentas en pacientes ambulatorios.

Distintos estudios han demostrado que la violencia en la esquizofrenia se asocia con determinados síntomas clínicos (presencia de delirios y alucinaciones) y con la falta de conciencia de enfermedad sobre los mismos. Esto sugiere que los actos violentos no son el resultado de la propia fisiopatología de la enfermedad, sino de la sintomatología de la misma.

¿Cómo podemos prevenir las conductas violentas en el paciente con esquizofrenia?

En función de lo expuesto anteriormente cabe decir que mientras que el paciente permanezca clínicamente estable el riesgo de presentar conductas violentas disminuye, y las variables que mejor las predicen son las mismas que para la población general (sociodemográficas, consumo de tóxicos).

Es aceptado que los neurolépticos no tratan la violencia “per se”, pero cuando ésta es secundaria a síntomas psicóticos, al ser eficaces sobre estos síntomas son también eficaces sobre la violencia secundaria a éstos.

El seguimiento y tratamiento psiquiátrico, la vinculación con los recursos rehabilitadores de la comunidad, y la integración sociofamiliar son herramientas imprescindibles para lograr el adecuado funcionamiento del paciente.

No debemos olvidar que muchas de las conductas violentas en el paciente esquizofrénico van dirigidas contra sí mismo (suicidio, autolesiones), y que en muchas ocasiones son víctimas de abusos y explotación.
Fuente saludmental.